















Managua se llenó de sabor, cultura y tradición con el primer “Festival Nacional del Baho y Fresco de Cacao” una iniciativa que busca resaltar la riqueza gastronómica de Nicaragua, promoviendo y salvaguardando este legado culinario como parte del patrimonio cultural.
El evento realizado la mañana de este sábado 22 de febrero, estuvo acompañado por el Vicealcalde de Managua, Enrique Armas Rosales, quien destacó que esta primera edición no solo buscó deleitar los paladares de los visitantes, sino también educar, preservar tradiciones y dinamizar la economía local.
“Tenemos dos docenas de compañeros y compañeras emprendedores de Managua, vendedores del municipio de Ticuantepe, San Rafael del Sur, San Francisco Libre, Ciudad Sandino, Villa el Carmen, vendedores que han venido a la capital a vendernos un delicioso cacao y un exquisito baho con diferentes precios desde 100 córdobas en adelante, este evento se está realizando este fin de semana en todo el territorio Nacional, esto forma parte de esta gran jornada, de promoción a nuestra gastronomía, nuestros valores, nuestras costumbres, nuestras tradiciones que ha venido promoviendo todos estos años el Gobierno del Comandante Daniel y la Compañera Rosario”, manifestó Armas.
Las familias, además de deleitarse con este platillo y bebida típica, disfrutaron de un ambiente lleno de color y alegría con presentaciones artísticas, música en vivo, bailes folclóricos, una amplia muestra gastronómica y artesanías.
“Los visito desde el barrio La Esperanza, vengo acompañada de mi esposo, esta actividad me parece muy buena porque así les dan chance a todos los protagonistas a vender sus productos como el baho y el cacao, este platillo es una comida típica de Nicaragua, tradicional de nosotros los nicaragüenses, así el que viene creciendo no se olvide de sus raíces”, expresó Ruth Herrera.
Meyling Díaz, comerciante del mercado Roger Deshon, fue la participante más joven de este evento, con mucho entusiasmo mencionó que desde los 19 años se dedicó a ofrecer este plato tradicional, “mi abuela le enseñó a mi mamá y ella me enseñó a mí, ahora yo se los estoy trasmitiendo a mis hijos, llevo aproximadamente 5 años de hacer el baho”.
Durante el festival, los comerciantes recibieron reconocimientos como una muestra de esa gran labor que realizan a diario, promoviendo la gastronomía de Nicaragua y dinamizando la economía local.